Nuestro safari en Tanzania, ¡una baraka!
Visitamos el Parque Nacional de Serengeti y el Área de Conservación de Ngorongoro durante 3 días desde el 19 de febrero de 2014. Nuestros días allí fueron la mejor manera de celebrar nuestros primeros 500 días viajando por el mundo. Debido a los altas precios de los permisos cobrados por el gobierno de Tanzania para visitar estas áreas protegidas, decidimos hacer parte de un grupo para disminuir los costos y pasar sólo una noche de campamento en cada parque. Las zonas de campamento sin cercos nos permitieron oír los animales salvajes caminando por nuestras carpas en medio de la noche. ¡Un grupo de hienas una noche y un búfalo hambriento comiéndose la hierba cerca a la carpa la otra noche hicieron que nuestro dormir fuera inolvidable!
Serengeti viene de la palabra Maasai, siringiti que significa llanura sin fin. El paisaje y ecosistema de este parque nacional son excepcionales para la localización de animales salvajes. Pasamos dos días conduciendo a lo largo de este espectacular parque y fuimos testigos de: la migración anual de los ñus para dar a luz en el sur; el elegante contraste de las cebras sobre las verdes llanuras; un grupo de leones descansando luego de un festín; tres leonas tratando de cazar una jirafa; una leopardo haciendo la siesta en un árbol durante una tarde calurosa; hipopótamos jugando en las aguas turbias; y los majestuosos árboles sombrilla y ficus que adornan el horizonte sin fin de Serengeti.
Ñus migrando hacia el sur
Ngorongoro es un área de conservación en el que los animales salvajes y la tribu Maasai que antes vivía en el Parque Nacional de Serengeti coexisten. Maasai son las únicas personas que tienen permiso para vivir en la reserva bajo la condición de que no pueden cazar animales salvajes o practicar la agricultura permanente. Durante nuestra visita a Ngorongoro, vimos muchos Maasai de la zona, adultos y niños caminando el ganado con sus ropas de colores tradicionales y su palo de madera. Habíamos escuchado mitos sobre estos guerreros Maasai enfrentando animales salvajes, como leones, pero luego de verlos viviendo entre la naturaleza, ¡no tenemos duda de que son verdaderos guerreros! Completamos un paseo por la mañana hasta el interior del cráter de Ngorongoro, el paisaje desde el exterior y la vida silvestre adentro son simplemente impresionante: elefantes, leones, búfalos, avestruces, babuinos, rinocerontes, gacelas, flamencos y muchos más, ¡todos a pocos metros de distancia entre si!
La felicidad de observar animales en su hábitat natural no tiene precio. Ellos merecen ser libres en la tierra tanto como lo somos nosotros. Esperamos que disfrutes nuestras imágenes de esta aventura y puedas sentirte inspirado por la naturaleza. ¡Este safari (viaje) sigue siendo nuestra mayor baraka (fortuna)!