Un viaje al paraíso – Islas Galápagos
Visitamos tres de las Islas Galápagos desde el 1 hasta 10 julio de 2015, con vuelos desde Guayaquil y transportes en lancha entre las islas. Pasamos tres noches en cada una de las islas: Santa Cruz, Isabela y San Cristóbal. ¡Durante nuestros días allí, la vida silvestre sobre y bajo el agua nos cautivaron y colmaron! No hay duda de que la observación de las especies que viven en estas islas motivó la teoría de la evolución de Charles Darwin. La belleza y vulnerabilidad de estas islas deben motivar a la humanidad a trabajar más sobre el objetivo de reducir nuestra huella en la tierra y conservar la vida tal y como es.
Visitar estas islas fue un sueño hecho realidad para nosotros. Las Islas Galápagos son un destino costoso, pero su singularidad hizo que cada centavo gastado valiera la pena. Con el fin de reducir costos en la medida de lo posible, tomamos las siguientes decisiones:
Reservamos nuestros vuelos de llegada y salida de las islas con tres meses de antelación.
Decidimos no tomar un crucero privado alrededor de las islas y permanecer en las islas donde el alojamiento estaba disponible y para viajar en lancha entre ellas.
Investigamos y reservamos nuestro alojamiento en hostal en cada isla con un mes de antelación para garantizar precios bajos, así como lugares donde pudiéramos hacer uso de la cocina.
Compramos alimentos y cocinamos la mayoría de nuestras comidas.
Nuestra estrategia para ahorrar dinero fue principalmente reducir ciertos gastos que son menos esenciales para nosotros sin dejar de lado las actividades especiales como el buceo y el esnórquel, las cuales hicieron que nuestra experiencia fuese realmente inolvidable.
Las islas que visitamos son 3 de las únicas 4 islas pobladas de Galápagos. Nos informaron que sólo el 3% de todo el parque nacional es habitado por seres humanos. Exploramos lugares hermosos y aprendimos muchísimas cosas en cada una de las islas que visitamos. En la isla de Santa Cruz, nos sorprendió el alto cactus opuntia, estas plantas son fundamentales para la supervivencia de la tortuga gigante y las iguanas que se alimentan de ellas. Durante nuestro primer día en las Galápagos observamos tortugos gigantes en cautiverio teniendo relaciones sexuales en el Centro de Investigación Charles Darwin, la prueba de que en la naturaleza la sexualidad no es sólo con fines reproductivos, sino también por placer.
Durante los tres días en Santa Cruz, visitamos Bahía Tortuga, Las Grietas, los Túneles de Lava y Los Gemelos. En Bahía Tortuga, nos encantó ver las iguanas marinas, pelícanos y aves en su hábitat natural. Las Grietas, con una mezcla de aguas de lluvia y del océano, fue un cañón perfecto con piscinas para refrescarnos. Nunca habíamos caminado a través de un túnel de lava como los Túneles en esta isla, fue como entrar en la tierra para entender cómo se formaron estas preciosas gemas volcánicas. Desde la isla de Santa Cruz, nos unimos a una excursión de buceo a la Roca Beagle y Daphne. Nos sorprendió el poder nadar cerca de tantas tortugas marinas, leones marinos, peces y diferentes especies de tiburones, incluyendo el martillo, arrecife de punta blanca y galápagos. ¡El buceo en Galápagos ha sido sin duda la más emocionante inmersión de nuestras vidas hasta hoy!
Tortuga marina
Nuestra segunda parada fue en la Isla Isabela, la más grande de las Islas Galápagos la cual se distingue por su silueta en forma de caballito de mar. Isabela es hogar a 5 volcanes y una gran variedad de vida. Entre 1946 y 1959 esta isla no fue lo que hoy conocemos, fue era la sede a la infame Penitenciaria Colonial de Isabela. Durante nuestro primer día en la isla, caminamos 5 km desde el puerto hasta el Muro de las Lágrimas, una pared inútil construida por los prisioneros que fueron víctimas de abusos.
A lo largo del paseo nos encontramos con animales hermosos en libertad, incluyendo las iguanas marinas negras camuflándose en las rocas o tomando una siesta sobre las playas de arena blanca, pelícanos clavando para pescar en el océano, los pájaros piqueros de patas azules descansando en grupo y las tortugas gigantes caminando lentamente por los senderos. En la Isla Isabela, nos unimos a una excursión al volcán Sierra Negra y Volcán Chico y aprendimos que las Islas Galápagos han sido formados por el mismo tipo de lava que creó las de Hawái. Nos sentimos como si estuviéramos en otro planeta mientras mirábamos todos los colores y formas formadas por la lava seca. En Isla Isabela también vimos hermosos flamencos que habitan lagunas con un nivel equilibrado de mar y agua dulce. Descubrimos que sólo hay 12 especies de tortugas gigantes en el mundo y la isla Isabela es hogar a 5 de ellas.
Las tortugas se aparean durante los meses más calurosos y la hembra hace un agujero en un área seca y ponen entre 6 a 14 huevos. Las tortugas bebés nacen unos 160 días después. Una vez que las tortugas bebé están fuera, tienen que sobrevivir por su cuenta. Actualmente, casi todas las tortugas bebés que nacen en su habitad natural mueren pues algunos de los animales (vacas, cerdos, cabras, burros, perros, gatos y ratas) introducidos en Galápagos por los primeros residentes las exterminan, comiéndoselas, pisándolas o destruyendo el medio ambiente que necesitan para sobrevivir. Por ello, los centros de crianza y protección son tan importantes. En estos centros, la tortuga adulta se mantiene en cautiverio para reproducirse y la tortuga bebé se mantienen bajo la protección por unos 8 años hasta que su caparazón sea lo suficientemente duro para resistir los ataques de los depredadores en su hábitat natural. Las tortugas gigantes tienen una larga expectativa de vida en comparación con los seres humanos y tardan alrededor de 150 años para verse realmente grandes. 🙂
Tortuga macho gigante en la isla Santa Cruz
Durante nuestro tercer día en la Isla Isabel, fuimos a hacer esnórquel en un tour a los túneles, que son formaciones de lava en el sur de la isla y hoy están cubiertas por agua de mar. Viajamos en lancha hacia este destino y en nuestro camino tuvimos la suerte de encontrarnos con un grupo de manta rayas y la oportunidad de nadar con ellas. Las mantas eran enormes y juguetonas, estar cerca de ellas fue a la vez excitante y aterrador. Cuando llegamos a los Túneles nos quedamos impresionados con los puentes y canales formados por la lava seca con cactus sobre ellos y tanta vida marina por debajo. Hicimos esnórquel en dos lugares diferentes en esta costa volcánica y vimos pingüinos, piqueros de patas azules, caballos de mar del pacífico, tiburones punta blanca, tortugas marinas y muchos peces.
De vuelta en la ciudad Villamil, donde nos alojábamos en la isla Isabela, terminamos nuestro día disfrutando de una deliciosa cena de mariscos a la parrilla. Fue el final perfecto para nuestros días en la isla Isabela. Viajar en lancha entre isla e isla cuando se cuenta con buenas condiciones meteorológicas y marítimas no toma mucho tiempo, un mínimo de dos horas entre las islas Isabela y Santa Cruz, y casi lo mismo desde Santa Cruz a San Cristóbal. Sin embargo, las fuertes corrientes marinas que se encuentran en las Islas Galápagos y traen tanta vida pueden hacer de estos cortos trayectos en lancha una experiencia mucho más prolongada y difícil. Luego de haber tomado dos viajes en lancha en el mismo día para ir desde Isabela a San Cristóbal nos sentíamos agotados, por suerte habíamos tomado pastillas para el mareo y no nos enfermamos en el camino. Por desgracia, muchos otros pasajeros no tuvieron la misma suerte, pero después de casi 5 ásperas horas de viaje en lancha tuvimos la sensación de estar sobre las olas hasta el día siguiente.
Nuestra última inmersión fue en la isla de San Cristóbal, en el famoso León Dormido o Roca Kicker. Buceamos en dos sitios diferentes y llegamos más cerca que nunca de los tiburones. Estuvimos rodeados por varios minutos por muchos tiburones Galápagos y algunos tiburones de arrecife de aleta blanca. En nuestra segunda inmersión, vimos una nube enorme de tiburones martillo pasar. También vimos tortugas marinas y una gran variedad de peces. ¿Cómo podría el buceo ser mejor después de estar en Galápagos? Tememos que volver a bucear no será tan emocionante después de estos encuentros sorprendentes con la fauna marina. Luego de bucear, visitamos la Bahía de Cerro Brujo y aprendimos sobre el ciclo de vida de los lobos marinos, su organización grupal y reproducción. ¡Vimos bebés, hembras, solteros y un macho alfa pasando el día en una hermosa playa de arena blanca con turquesa mar!
Tiburones de arrecife
Leones marinos jugando
Durante nuestros días en las Islas Galápagos, aprendimos no sólo sobre el origen de estos tesoros volcánicos, su fauna y flora, sino también sobre la historia de la gente que llegó hasta ellas. Desde piratas, colonizadores, presos ecuatorianos, el ejército de Estados Unidos y los colonos actuales, estas importantes islas que inspiraron a Darwin, han sido explotadas y víctimas de los abusos y malas decisiones de muchos seres humanos. Las tortugas gigantes han estado en riesgo de extinción debido a la caza humana y a pesar de que esta práctica se ha prohibido, la tortuga ya no puede reproducirse libremente pues muchos otros animales que fueron introducidos por el hombre se convirtieron en sus depredadores. El equilibrio natural de las islas sigue estando en riesgo. El Parque Nacional dice que sólo el 3% de las islas están dedicadas a la ocupación humana, pero nos preguntamos si no es más. Estábamos, por ejemplo, sorprendidos al ver enormes extensiones de tierra destinadas a la agricultura y la ganadería en la Isla Santa Cruz. Las islas no tienen fuentes de agua dulce y sin embargo se espera que la población que vive en las islas Santa Cruz, Isabela, San Cristóbal y Floreana siga aumentando. Turistas como nosotros siguen llegando y más alimentos, agua, electricidad y gasolina son consumidos. En la Isla Isabela, nos quedamos boquiabiertos y molestos al ver un hotel con una piscina frente al mar.
¿Por qué este tipo de construcciones son permitidas en un Parque Nacional sin recursos hídricos? ¿Qué tipo de turismo está promoviendo el Parque Nacional? ¿Dónde está la conciencia de las autoridades, empresarios, miembros de la comunidad y los visitantes responsables que permiten o toleran que este tipo de hoteles se construyan? Mientras caminábamos a Playa Lobería, en la Isla San Cristóbal vimos varias máquinas de construcción excavando en el suelo donde ya existe un agujero de gran profundidad. Se veía como un cementerio de lo que algún día fue una hermosa colina. Un residente nos dijo que la colina fue completamente destruida para obtener tierra para proyectos de construcción dentro de la isla.
Nos sentimos tan sorprendidos, enojados y decepcionados al ver esta explotación de los recursos naturales. ¿No son las Islas Galápagos un Parque Nacional y Patrimonio de la Humanidad declarado por la UNESCO? ¿Por qué este tipo de prácticas son permitidas en Galápagos? ¿O es que el término “Parque Nacional Galápagos” es sólo un nombre usado a la conveniencia del gobierno Ecuatoriano para cobrar $100 USD a cada visitante extranjero? La lista de preocupaciones continúa, los residentes de las islas nos contaron que el gobierno ecuatoriano ha hecho cambios en la legislación de protección de las áreas marinas y ellos mismos no entienden cuáles serán las posibles implicaciones de esta nueva ley. Hay que decir que nos fuimos de Galápagos con dos sentimientos: 1) Felices de haber visto por primera vez en nuestras vidas una diversidad de fauna y flora que no se ve en ningún otro lugar del mundo. 2) Preocupados de que esta biodiversidad llegue a ser extinta un día y las futuras generaciones no logren alcanzar el privilegio de vivirlo.
Cuando el 10 de julio de 2015 llegó, nos fuimos de las Islas Galápagos sin querer irnos… Este capítulo del viaje ha sido, sin duda, uno de los más destacados a lo largo de nuestro viaje por el mundo. 🙂